Cómo la nobleza imaginaria se convirtió en la clave del dominio total de la empresa.
En el verano de 2021, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, reunió a los líderes de las principales empresas de tecnología, incluidas Microsoft, Amazon y Google, para discutir las ciberamenazas relacionadas con países hostiles. El presidente instó a mejorar el nivel de protección, y Microsoft prometió destinar $150 millones para fortalecer la ciberseguridad en las estructuras federales.
Las promesas parecían nobles, pero una investigación de ProPublica reveló que detrás de la generosa oferta se escondía una estrategia empresarial. Microsoft ofreció gratuitamente sus productos y servicios de consultoría a agencias gubernamentales, pero estos servicios tenían un plazo limitado. Al expirar dicho plazo, la transición a otras soluciones se volvía costosa y compleja.
Esa táctica permitió a la compañía consolidarse en las instituciones federales. Los productos de Microsoft se volvieron indispensables, lo que obligó a las agencias a firmar contratos a largo plazo para usar su plataforma en la nube Azure. Esta estrategia, conocida internamente como «la oferta de la Casa Blanca», resultó en un aumento significativo de los ingresos de la empresa.
Exempleados de Microsoft compararon este enfoque con un «anzuelo» para los clientes: aunque inicialmente los productos se ofrecían gratis, la empresa no planeaba mantener esa política indefinidamente. Ahora, la eliminación de sus productos se ha vuelto prácticamente imposible. Al mismo tiempo, Microsoft desplazó a sus competidores, alentando a las agencias a abandonar sus servicios en favor de su ecosistema.
Expertos en adquisiciones gubernamentales calificaron este modelo como arriesgado para la competencia y la seguridad nacional. Creaba un efecto de «monocultura», en el que todo el sistema dependía de un único proveedor, lo que aumentaba la vulnerabilidad frente a ciberataques.
Microsoft niega las acusaciones de violar las leyes antimonopolio, afirmando que sus propuestas cumplían con los requisitos y se alineaban con la Casa Blanca. Sin embargo, la investigación reveló que no hubo una aprobación oficial por parte de la administración de Biden para realizar una revisión antimonopolio.
En 2023, hackers chinos aprovecharon una vulnerabilidad en los productos de Microsoft para hackear cuentas de correo electrónico de altos funcionarios. Esto atrajo una atención adicional hacia las acciones estratégicas de la empresa y sus implicaciones para las estructuras federales.
La historia de «la oferta de la Casa Blanca» plantea preguntas sobre cómo la interacción entre el gobierno y el sector privado afecta al entorno competitivo y a la seguridad nacional.