El tema de las granjas de bots se vuelve cada vez más relevante con el crecimiento de las redes sociales y las plataformas en línea. Muchos han oído hablar de los bots en el contexto de aumentar seguidores o “me gusta”, pero pocos comprenden realmente qué hay detrás de este fenómeno. Las granjas de bots se han convertido en una parte esencial del mundo digital, influyendo en el marketing, la política e incluso la opinión pública. Pero, ¿qué son exactamente, cómo generan ingresos y cuáles son los problemas y riesgos asociados?
Una granja de bots es una infraestructura compuesta por numerosas cuentas falsas (bots) controladas por un software que realiza diversas tareas en Internet. El objetivo principal es crear la ilusión de actividad, influyendo en la percepción de los usuarios y en los algoritmos de las plataformas. Los bots pueden aumentar la cantidad de “me gusta”, seguidores, comentarios y también utilizarse para difundir noticias falsas o manipular la opinión pública.
Venta de seguidores y “me gusta”
Una de las formas más populares de generar ingresos consiste en vender seguidores y “me gusta”. Los clientes (a menudo blogueros, empresas o influencers) compran actividad falsa para aumentar la credibilidad de su cuenta y atraer usuarios reales. El precio de estos servicios depende de la calidad de los bots; pueden ser primitivos (fácilmente detectables) o más sofisticados, imitando cuentas reales.
Massfollowing y massliking
Esta práctica consiste en que los bots sigan de manera masiva las cuentas de usuarios o en que den “me gusta” en masa a su contenido. El objetivo es estimular la reciprocidad en los seguidores o llamar la atención. Esto es especialmente efectivo en redes sociales como Instagram y Twitter.
Creación de noticias falsas y “black PR”
Las granjas de bots también se utilizan con fines políticos. Por ejemplo, pueden contratarse para desacreditar a competidores o difundir desinformación. En 2016, durante las elecciones presidenciales en Estados Unidos, se utilizaron granjas de bots para crear noticias falsas y manipular la opinión pública.
Influencia en calificaciones y reseñas
Muchas empresas o particulares utilizan bots para inflar las calificaciones en plataformas como Amazon o TripAdvisor. Los bots escriben reseñas positivas falsas, lo que aumenta la confianza de los compradores en un producto o servicio. Un ejemplo podría ser una compañía que use bots para generar una avalancha de reseñas positivas en su sitio antes de una gran venta.
Aumento de tráfico en sitios web
La creación de tráfico falso es otra forma de ganar dinero. Algunos sitios web utilizan bots para incrementar el número de visitas, lo que hace que el sitio resulte más atractivo para los anunciantes.
Rápida captación de atención
Los bots pueden incrementar rápidamente las cifras de una cuenta (seguidores, “me gusta”, etc.). Esto atrae a usuarios reales y crea la ilusión de éxito.
Costes bajos
Los servicios de las granjas de bots son relativamente económicos en comparación con las campañas de marketing tradicionales. Esto las hace asequibles para pequeños negocios y blogueros que están empezando.
Flexibilidad de uso
Las granjas de bots pueden emplearse en diferentes plataformas con múltiples propósitos: redes sociales, sitios de reseñas e incluso recursos de noticias para promocionar información.
Baja calidad de audiencia
Aunque los bots pueden aumentar el número de seguidores, no aportan un beneficio real en términos de interacción, comentarios o compras. Además, las cuentas falsas pueden ser eliminadas en cualquier momento.
Riesgo de bloqueo de cuentas
Plataformas como Instagram* y Twitter** luchan activamente contra los bots. El uso de bots puede llevar al bloqueo de cuentas, lo que puede dañar seriamente la reputación y el trabajo invertido.
Violación de la ley
En muchos países, el uso de bots para manipular datos, especialmente con fines políticos, es ilegal y puede acarrear consecuencias graves, como multas o penas de cárcel.
Desconfianza de los usuarios
La gente está cada vez más al tanto de las estrategias de inflación artificial y actividad falsa. Esto puede afectar negativamente a la confianza en la marca o el producto.
Aunque las granjas de bots pueden ofrecer resultados rápidos y parecen una solución económica para incrementar la actividad en Internet, a largo plazo causan más perjuicios que beneficios. Los usuarios reales valoran la autenticidad y la confianza, y el uso de bots puede destruir la relación con la audiencia, además de ocasionar consecuencias graves, como el bloqueo de cuentas o problemas legales. Invertir en un crecimiento orgánico y en la interacción genuina siempre será un enfoque más sostenible y prometedor para el desarrollo.