La corporación acelera en la carrera contra OpenAI.
Google está trabajando activamente en una inteligencia artificial que pueda pensar de forma similar a un ser humano. El desarrollo se asemeja al modelo o1 de OpenAI y aviva la competencia entre el gigante tecnológico y la ambiciosa startup.
Según fuentes confiables, varios equipos de Alphabet Inc., la empresa matriz de Google, han logrado resultados impresionantes en los últimos meses en el desarrollo de IA capaz de razonar. Las nuevas tecnologías son especialmente efectivas al abordar tareas complejas en matemáticas y programación, que requieren resoluciones paso a paso.
Los científicos creen que el desarrollo de una IA con capacidad de razonamiento será el próximo gran avance en tecnología. Tanto Google como OpenAI están tratando de enseñar a las máquinas a pensar de manera humana mediante el método de la "cadena de razonamientos". Este enfoque, que fue aplicado por primera vez precisamente por Google, permite que el programa haga una pausa de unos segundos antes de responder. Durante este tiempo, analiza varios posibles resultados y selecciona el mejor, sin que el usuario lo note.
La competencia entre Google y OpenAI se intensificó con el lanzamiento de ChatGPT, el chatbot que ha generado gran revuelo. Algunos inversores temen que, con el tiempo, podría desplazar el motor de búsqueda de Google. En respuesta, la empresa tomó una serie de medidas: fusionó los principales laboratorios de investigación en la división Google DeepMind y fortaleció la colaboración entre científicos y desarrolladores de productos.
Sin embargo, Google sigue siendo cautelosa con el lanzamiento de productos de IA. La empresa evalúa cuidadosamente cuestiones éticas, busca cumplir con las expectativas de los usuarios y considera los intereses de muchos proyectos similares dentro de su vasta estructura.
Cuando a mediados de septiembre OpenAI presentó su modelo o1 (llamado internamente "Strawberry"), algunos empleados de DeepMind se preocuparon por quedar rezagados respecto a la competencia. Sin embargo, después de que Google mostró sus avances, la inquietud disminuyó, al menos en comparación con la ansiedad que se experimentó tras el lanzamiento de ChatGPT.
A pesar de su lentitud en el lanzamiento de productos, Google sigue siendo un actor serio en el mercado de la IA. Oren Etzioni, investigador experimentado de IA y fundador de la organización sin fines de lucro TrueMedia.org, que lucha contra la desinformación política, señala: "Google siempre ha estado en la cima a nivel técnico. Simplemente, han sido más cautelosos al lanzar novedades. Esta carrera es un maratón, y cualquiera puede ganar".
En julio, Google presentó AlphaProof para problemas matemáticos y AlphaGeometry 2, una versión actualizada de un programa para resolver acertijos geométricos. Estos sistemas lograron resolver cuatro de los seis problemas de la Olimpiada Matemática Internacional, una competición anual donde los estudiantes resuelven complejos desafíos de álgebra y geometría.
En la conferencia de desarrolladores de mayo, Google mostró a Astra, un asistente de IA que puede "ver" el mundo a través de la cámara de un smartphone y responder preguntas. Por ejemplo, Astra puede ayudar a encontrar unas gafas olvidadas en algún lugar. La corporación planea añadir algunas de las funciones de este asistente a su principal modelo de IA, Gemini, a finales de año.
Demis Hassabis, jefe de Google DeepMind, subrayó en una publicación de julio en la red social X la importancia de desarrollar habilidades matemáticas en la IA moderna. Esta declaración es una muestra más de que Google aspira a crear una inteligencia artificial capaz de realizar operaciones analíticas complejas, casi como lo haría un ser humano.