El nuevo robot con DeepSeek a bordo sonríe como si supiera cuánto ganas.
El fabricante de automóviles chino Chery presentó un nuevo concepto de interacción con los clientes en los concesionarios, lanzando el uso de robots humanoides como asesores. El desarrollo recibió el nombre de AIMOGA — una abreviatura de «Artificial Intelligence with Multi-Objective Genetic Algorithm». Los robots fueron creados por una división propia de la empresa dedicada a la robótica, formada a mediados de 2024.
El dispositivo es capaz de desplazarse, entender el habla y responder en 10 idiomas. El reconocimiento de voz y las respuestas inteligentes se logran gracias a la integración con los modelos lingüísticos de DeepSeek. Según Chery, el robot está equipado con una biblioteca de movimientos similares a los humanos, lo que hace que la interacción sea más natural. Además, se utiliza un rostro de silicona con imitación de piel para acercar visualmente su apariencia a la humana.
La empresa muestra activamente a su robot en redes sociales y usó su imagen para atraer la atención al stand en el salón del automóvil de Shanghái. Los videos con AIMOGA ilustran el desarrollo del proyecto: si antes sus movimientos eran rígidos, en los nuevos materiales se nota una fluidez mucho mayor, especialmente en el movimiento de las manos.
El robot está equipado con 41 grados de libertad, de los cuales 12 corresponden a cada brazo. Esta estructura permite realizar manipulaciones complejas con alta precisión. Además, AIMOGA puede moverse a una velocidad de hasta un metro por segundo y orientarse en el espacio gracias a un sistema de cinco sensores. Este sistema le permite evitar obstáculos con una precisión de hasta un centímetro y trazar rutas incluso en condiciones complejas.
Por ahora, estos robots están destinados a operar en los concesionarios insignia de Chery en Malasia, aunque la empresa no descarta ampliar su uso a otros países. Sin embargo, la apariencia externa de las máquinas provoca reacciones encontradas: las demostraciones públicas muestran que todos los modelos se asemejan a mujeres con cabello largo y rubio, lo que ha generado críticas sobre los estereotipos visuales y de género incorporados en el producto.