Firmas legales falsas están cazando activamente a víctimas de estafas criptográficas.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) emitió el 24 de junio una advertencia sobre nuevos esquemas de fraude en los que los delincuentes se hacen pasar por firmas legales y abogados, ofreciendo servicios para recuperar criptomonedas robadas a víctimas de estafas de inversión. En realidad, los estafadores solo empeoran la ya triste situación, robando tanto el dinero restante de la víctima como sus datos personales.
La advertencia del FBI es una actualización de un aviso del año pasado, que señalaba un aumento en los fraudes relacionados con servicios falsos de recuperación de activos digitales.
Los estafadores operan de la siguiente manera: primero convencen a las víctimas de la legitimidad de sus servicios, afirmando que colaboran con agencias gubernamentales como el FBI y la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB). Luego mencionan instituciones financieras y exchanges reales en sus mensajes, creando una falsa sensación de legalidad y capacidad para recuperar los fondos perdidos.
Según el FBI, los estafadores a menudo utilizan las siguientes tácticas:
Las estadísticas del Centro de Quejas de Delitos por Internet (IC3) muestran que las víctimas de estos fraudes secundarios con promesas de devolución de criptomonedas pagaron a los delincuentes más de 9 millones de dólares entre febrero de 2023 y febrero de 2024.
Por su parte, las agencias estatales y federales legítimas pueden, en ciertos casos, rastrear criptomonedas robadas, congelarlas y redirigirlas a carteras seguras para su posterior devolución a las víctimas. Estos servicios se proporcionan de forma gratuita, y nunca se pide a las víctimas que proporcionen datos personales adicionales o paguen tasas.
Es importante señalar que ninguna empresa privada tiene derecho a emitir órdenes de confiscación de fondos, por lo que cualquier afirmación al respecto en redes sociales, publicidad en Internet y comentarios son señales de fraude.
Al enfrentarse a afirmaciones sobre la posibilidad de recuperar criptomonedas robadas, se recomienda investigar cuidadosamente la información sobre la empresa en Internet antes de compartir información personal o enviar pagos. Si una persona ha sido víctima de fraude o sospecha que ha sido contactada por estafadores, se recomienda presentar una queja en el portal IC3, proporcionando tantos detalles como sea posible sobre el estafador y la transacción financiera.