No es necesario abrir un paquete para saber todo lo importante sobre una persona y más.
Investigadores en EE.UU. han destacado un programa poco conocido del Servicio Postal llamado "mail covers program". Según informa el Washington Post , esta práctica ha permitido durante mucho tiempo a las fuerzas del orden obtener información sobre los envíos postales de algunos estadounidenses.
Según la definición oficial, el "mail covers program" es una actividad de investigación en la que se registran los datos indicados en el exterior de un envío postal.
Aunque el procedimiento no permite acceder al contenido de las cartas, la información del sobre o paquete puede ser muy reveladora. Los nombres y direcciones de los remitentes y destinatarios, las fechas de envío y otras marcas externas pueden proporcionar a los investigadores información valiosa sobre las conexiones y actividades de una persona bajo vigilancia.
Entre los organismos que solicitan información se encuentran el FBI, el Servicio de Impuestos Internos (IRS), el Departamento de Seguridad Nacional, así como el propio servicio de investigación del Servicio Postal — U.S. Postal Inspection Service. El Washington Post también informa que la policía estatal y las fuerzas del orden locales utilizan este programa. Cabe destacar que para obtener los datos no se requiere una orden judicial ni la autorización de un juez.
La magnitud del uso del programa es impresionante: en un período de cuatro años, el Servicio Postal aprobó más de 158,000 solicitudes de información. Además, según los datos más recientes, las agencias policiales realizan en promedio unas 6,700 solicitudes al año.
Esta situación ha generado preocupación entre varios legisladores, incluidos los senadores Ron Wyden (D-Ore.) y Elizabeth Warren (D-Mass.). Ellos exigen mayor transparencia y un control más estricto sobre el programa.
Sin embargo, el "mail covers program" palidece en comparación con otra conocida iniciativa de seguimiento postal — Mail Isolation Control and Tracking. El Servicio Postal de EE.UU. fotografía automáticamente el exterior de cada envío que pasa por el sistema. Oficialmente, este procedimiento está destinado a optimizar la clasificación y entrega de la correspondencia. Sin embargo, como informó la agencia Associated Press, las fotografías también pueden ser utilizadas por las fuerzas del orden en el curso de investigaciones.
La situación preocupa a los ciudadanos, algunos de los cuales afirman que han sido objeto de vigilancia a pesar de no haber cometido nunca nada ilegal. Al mismo tiempo, los funcionarios insisten en que el programa se utiliza exclusivamente para investigar actividades delictivas, en casos extremos.
Los periodistas han solicitado comentarios al Departamento de Justicia y al Servicio Postal de EE.UU., pero aún no han recibido respuesta.