Almuerzo cifrado: los piratas informáticos atacan la producción de pollo en Sudáfrica

Una de las mayores empresas agroindustriales de Sudáfrica — Astral Foods — confirmó que el 16 de marzo fue víctima de un ciberataque que provocó interrupciones en la producción y la logística. El incidente afectó a todas las unidades de negocio, incluyendo el procesamiento de carne, el suministro de productos y la producción de piensos. La empresa se vio obligada a activar de emergencia todos sus planes de respuesta ante situaciones críticas.

Las interrupciones duraron casi una semana y causaron paros en la producción, fallos en las entregas y ruptura de las cadenas logísticas. Astral Foods estimó las pérdidas directas en 20 millones de rands sudafricanos, lo que equivale a aproximadamente un millón de dólares estadounidenses. Las pérdidas afectaron principalmente a la rentabilidad del actual ejercicio financiero, que finaliza la próxima semana. La empresa advirtió a los inversores que el beneficio por acción disminuirá significativamente respecto a las previsiones.

A pesar de la magnitud del ataque, según declaró Astral Foods, el funcionamiento de todas las divisiones ha sido restablecido y actualmente el negocio opera con normalidad. Además, según afirma la empresa, ninguna información confidencial de clientes, proveedores u otras partes interesadas fue comprometida como resultado de la intrusión.

El tipo de ataque y las identidades de los atacantes aún no han sido revelados. Ningún grupo de ransomware conocido se ha atribuido la responsabilidad del incidente, y los representantes de Astral Foods no han comentado los detalles del suceso. Esto genera preocupación, dado el aumento general de ataques al sector agroindustrial.

Según datos del centro analítico Food and Agriculture-ISAC, solo en 2023 el sector agrícola fue blanco de al menos 167 ataques con uso de programas de ransomware. Los atacantes a menudo eligen este tipo de objetivos debido a la alta probabilidad de recibir pagos a cambio de restaurar el acceso a los sistemas y evitar interrupciones en el suministro de alimentos.

En los últimos años, otros grandes productores de alimentos también han sido víctimas de ciberataques, incluyendo JBS, Dole, Sysco y Mondelez. Incluso el Departamento de Agricultura de EE. UU. confirmó el año pasado que fue víctima de un ataque a su sistema de transmisión de datos, lo que provocó una filtración significativa de información sectorial.

Los incidentes más graves en el sector agroindustrial han causado pérdidas de millones de dólares. En 2021, una granja en EE. UU. perdió nueve millones de dólares debido al bloqueo de sus sistemas de producción. Los ciberincidentes a gran escala siguen socavando la estabilidad de las cadenas globales de suministro de alimentos y aumentando los riesgos para la seguridad alimentaria.

Aunque hasta ahora las consecuencias del ataque a Astral Foods se han limitado a interrupciones a corto plazo, el caso plantea una cuestión importante sobre la preparación de las corporaciones agrícolas ante tales amenazas. Dada la importancia de estas empresas para el sistema alimentario de países enteros, incidentes de este tipo pueden tener consecuencias a largo plazo para la economía nacional.