Corea del Norte ha superado a El Salvador y Bután en reservas de Bitcoin
El grupo Lazarus ha reabastecido el tesoro criptográfico del país en una cantidad cósmica.
Según los datos de Arkham Intelligence, Corea del Norte ha aumentado significativamente sus activos en bitcóin tras el hackeo de la bolsa de criptomonedas Bybit el 21 de febrero. Como resultado del ataque, los hackers robaron criptomonedas por un valor de $1,4 mil millones, lo que se convirtió en el mayor robo de activos digitales en la historia de las criptobolsas. Posteriormente, Lazarus convirtió una parte significativa del éter robado en bitcóin utilizando el protocolo descentralizado THORChain.
Ahora, las reservas de Corea del Norte en bitcóin se estiman en $1,13 mil millones (13 518 BTC), lo que la sitúa por encima de Bután con sus 10 635 BTC y de El Salvador con 6 118 BTC. Bután está aumentando sus reservas a través de una minería a gran escala, mientras que El Salvador ha estado comprando criptomonedas de forma sistemática desde 2021, cuando el bitcóin obtuvo el estatus de moneda de curso legal en el país.
Antes del ataque a Bybit, el grupo Lazarus ya había llevado a cabo varios cibercrímenes de gran escala. En 2022, robó $615 millones de la plataforma Ronin Network, y en 2023 atacó a la empresa japonesa DMM Bitcoin, sustrayendo $308 millones.
Además de bitcóin, los hackers norcoreanos poseen criptoactivos por un valor aproximado de $30 millones, incluyendo ETH, BNB, DAI y BUSD. Sin embargo, a pesar de sus grandes reservas, Corea del Norte está lejos de alcanzar a Estados Unidos, que, según Arkham Intelligence, controla 198 109 BTC confiscados en procesos penales y civiles. Reino Unido también se encuentra entre los mayores poseedores, con una reserva de 61 245 BTC.
Washington ha declarado en múltiples ocasiones que Corea del Norte financia la mitad de su programa de desarrollo de armas de destrucción masiva y misiles balísticos a través de ciberataques y robos de criptomonedas. A pesar de las sanciones internacionales y los intentos de bloquear los flujos financieros ilegales, Corea del Norte continúa operando activamente en la criptoeconomía clandestina.