El contenido y las extensiones DRM dejarán de funcionar a menos que actualice su navegador.
Los usuarios de Firefox deben actualizar el navegador a la versión 128 o ESR 115.13+ antes del 14 de marzo de 2025 para evitar problemas con las extensiones y la reproducción de contenido protegido. La razón es que en esta fecha expirará uno de los certificados raíz utilizados para verificar las extensiones firmadas, firmas digitales y otras funciones del navegador. Si la actualización no se instala a tiempo, el funcionamiento de las extensiones, los mecanismos de actualización remota y el contenido DRM podría verse afectado.
La actualización es necesaria para todos los usuarios de Firefox que utilicen Windows, macOS, Linux y Android. Si el navegador no se actualiza, las extensiones existentes pueden deshabilitarse y los archivos multimedia protegidos, como el video en streaming, pueden dejar de reproducirse.
El certificado raíz tiene la función de verificar la autenticidad de los sitios web, extensiones y actualizaciones de software. Cuando expira, el navegador pierde la capacidad de autenticar estos elementos, lo que puede provocar la desactivación de ciertas funciones. Firefox 128 y ESR 115.13+ incluyen un nuevo certificado que evitará estos problemas y garantizará el funcionamiento ininterrumpido del navegador.
Para comprobar la versión del navegador en una PC, es necesario abrir el menú de Firefox, seleccionar «Ayuda» y hacer clic en «Acerca de Firefox»; en esta ventana se mostrará la versión actual y se verificará automáticamente la disponibilidad de actualizaciones. En Android, la versión se puede consultar abriendo el menú de configuración y seleccionando la sección «Acerca de Firefox». Si el navegador notifica al usuario sobre la necesidad de una actualización, significa que la versión actual está desactualizada. Para los usuarios de iOS, la actualización del navegador no es necesaria.
Cabe destacar que la actualización a la última versión de Firefox no afectará los marcadores guardados, contraseñas ni configuraciones. Sin embargo, como medida de precaución, se recomienda habilitar la sincronización a través de una cuenta de Mozilla para que todos los datos queden guardados antes de la instalación de la actualización.
Los usuarios que no actualicen Firefox se enfrentarán a la desactivación de extensiones, la imposibilidad de reproducir contenido DRM y fallos en el funcionamiento de algunos sitios web. Además, la falta de actualización puede derivar en problemas graves de seguridad, como la vulnerabilidad ante extensiones maliciosas, la verificación incorrecta de certificados digitales y la imposibilidad de recibir notificaciones sobre la posible filtración de contraseñas.