El falso corredor convirtió a Google en su caja registradora de $50 millones

Un residente de California fue condenado a 7 años y 3 meses de prisión por su participación en un esquema fraudulento que perjudicó a decenas de inversores. Allen Giltman, de 59 años, junto con sus cómplices, creó desde 2012 sitios web falsos que se hacían pasar por instituciones financieras y ofrecían inversiones supuestamente rentables. En 8 años, los estafadores robaron aproximadamente 50 millones de dólares.

Los delincuentes crearon más de 150 sitios web falsos, promocionándolos en Google y Microsoft Bing con términos de búsqueda como "las mejores tasas de depósito". Los ciberdelincuentes se hacían pasar por corredores registrados en la Autoridad Reguladora de la Industria Financiera de EE. UU. (FINRA) y convencían a las víctimas de transferir dinero para comprar certificados de depósito inexistentes. Una vez recibidos los fondos, el dinero se distribuía de inmediato a cuentas en Rusia, Georgia, Hong Kong y Turquía.

Giltman se hacía pasar por asesores financieros legítimos, utilizando nombres reales y números de registro. Se comunicaba directamente con las víctimas por teléfono y correo electrónico, ayudándolas a realizar las transferencias. También enviaba documentos e instrucciones para los pagos, tras lo cual los fondos eran transferidos a cuentas en el extranjero. Ninguna de las 70 víctimas estafadas recibió los valores prometidos.

Para ocultar su identidad, los estafadores usaban herramientas para cambiar la dirección IP, mensajería cifrada, teléfonos de prepago y tarjetas de regalo para registrar dominios. También falsificaban documentos para justificar grandes transferencias de dinero.

En 2020, las autoridades arrestaron a Giltman, y en enero de 2022, él se declaró culpable. Ahora deberá cumplir 87 meses en una prisión federal y, tras su liberación, permanecerá bajo supervisión durante 3 años. El tribunal también ordenó la confiscación de los activos incautados a Giltman en el momento de su arresto.