¿Por qué los programas espía italianos han evitado sanciones de EE.UU. durante tantos años?
Los especialistas descubrieron que el software espía que se utilizó para espiar a los ciudadanos de Kazajistán en 2022 no fue desarrollado en Kazajistán ni adquirido de proveedores conocidos de Israel; el programa pertenece a la empresa italiana RCS Labs, que apareció en el mercado en 1992, mucho antes de que se formaran los mercados de software espía en otros países europeos.
Hermit también se utilizó en Siria e Italia. Según datos publicados por Wikileaks en 2015, RCS colaboró con militares y servicios de inteligencia en países como Pakistán, Chile, Mongolia, Bangladesh, Myanmar, Vietnam y Turkmenistán.
Italia se ha convertido en uno de los principales centros de desarrollo de software espía en Europa. Aquí operan varias grandes empresas que venden sus soluciones sin un control estricto. Por ejemplo, el Ministerio de Justicia de Italia ha establecido una tarifa para el alquiler de software espía de €150 al día, lo que permite a las fuerzas del orden utilizar estas herramientas sin grandes costes de adquisición.
Empresas italianas como RCS Labs y Memento Labs (anteriormente Hacking Team) venden activamente sus desarrollos en el extranjero. A diferencia de la israelí NSO Group, su software no genera tanta controversia ni está sujeto a sanciones de EE.UU., ya que los programas italianos no se han utilizado para atacar a ciudadanos estadounidenses.
El mercado italiano de software espía sigue siendo uno de los más grandes del mundo. Las empresas crean soluciones más accesibles y económicas que los programas complejos como Pegasus, aunque sus programas también pueden interceptar llamadas, mensajes, y activar el micrófono y la cámara en los dispositivos.
En los últimos años, en Italia se ha intentado limitar el uso de software espía en varias ocasiones. En 2017 se propusieron reformas para controlar el uso de estos programas, pero la ley no fue aprobada en ese entonces. Sin embargo, a partir de febrero de 2024, entrará en vigor una nueva ley que exige a los jueces una revisión independiente antes de emitir permisos para utilizar software espía.
No obstante, los expertos dudan de que la nueva ley cambie significativamente la situación. En el país aún no existe un organismo único que controle el uso de software espía. Los fiscales y la policía pueden obtener permisos fácilmente, lo que hace que estos programas sean tan populares en Italia.
Recordemos que la policía italiana está investigando un caso de acceso ilegal a bases de datos gubernamentales, en el que cuatro personas han sido puestas bajo arresto domiciliario y se están llevando a cabo investigaciones sobre decenas de personas, incluido Leonardo Maria Del Vecchio, hijo del fundador de Luxottica.
También en febrero se informó que 8 empresas de TI crearon un sistema global de rastreo de usuarios. Esto se conoció después de que Meta Platforms* anunciara la restricción de actividades maliciosas de empresas en Italia, España y los Emiratos Árabes Unidos, dedicadas al espionaje por encargo. Los programas espía desarrollados estaban dirigidos a dispositivos con iOS, Android y Windows.
* Meta y sus productos han sido declarados extremistas, y sus actividades están prohibidas en el territorio de la Federación Rusa.