Un error de los funcionarios locales pone en duda la seguridad de los votos de los electores.
En Colorado, se ha desatado un escándalo debido a la filtración de contraseñas de los sistemas de votación que quedaron expuestas en acceso abierto en la red. El incidente ocurrió por un error de los empleados de la oficina del secretario de estado y ha generado inquietud en vísperas de las elecciones. El empleado responsable de la filtración ya ha sido despedido, y actualmente se lleva a cabo una investigación interna.
Jena Griswold, secretaria de estado de Colorado, informó que las contraseñas filtradas solo estaban parcialmente accesibles y no proporcionan acceso completo a los sistemas. Según Griswold, la filtración ocurrió de manera accidental y no representa una amenaza para la seguridad de las elecciones.
No obstante, los empleados de las comisiones electorales de Colorado están revisando los sistemas y reevaluando los accesos para eliminar cualquier riesgo. La secretaria del condado de Boulder, Molly Fitzpatrick, señaló que para utilizar los datos filtrados sería necesario tener presencia física y acceso al equipo, el cual está estrictamente controlado.
Algunos empleados de los órganos electorales se enteraron del problema solo después de que la información fuera publicada abiertamente por el partido republicano de Colorado. Los funcionarios expresaron su descontento porque la oficina del secretario de estado sabía del incidente aproximadamente una semana antes, pero no notificó a las autoridades locales.
Los problemas de seguridad en la votación ya habían sido discutidos en el estado en relación con el caso de la ex secretaria del condado de Mesa, Tina Peters. Como resultado de sus acciones el año pasado, se aprobó una ley que convierte en delito penal la publicación de contraseñas de los equipos electorales.
Los republicanos del estado, incluyendo a la líder de la minoría Rose Pugliese, exigen la renuncia de Griswold, acusándola de "negligencia" y de socavar la confianza en el sistema electoral. También recuerdan incidentes anteriores en los que su oficina envió notificaciones de registro electoral a no residentes.
En respuesta a las críticas, Griswold declaró que su oficina enfrenta una falta de financiación y enfatizó que su equipo trabaja arduamente para proteger el sistema de votación en medio de amenazas y teorías de conspiración constantes.
Mientras tanto, el líder del partido republicano del estado, Dave Williams, exigió explicaciones sobre el incidente, prometiendo tomar medidas legales si las respuestas recibidas no satisfacen las demandas de seguridad electoral.