La tecnología ayudará a los militares a seleccionar municiones y objetivos en el campo de batalla.
Durante los ejercicios Scarlet Dragon, los militares estadounidenses realizaron pruebas con el nuevo sistema de inteligencia artificial Maven Smart System (MSS), que muestra resultados impresionantes en términos de análisis de situaciones y toma de decisiones en el campo de batalla. Maven, desarrollada con la participación de numerosos proveedores de software y servicios de IA, fue probada con éxito por el 18º Cuerpo Aerotransportado de EE.UU. El sistema es capaz de evaluar rápidamente el espacio de combate, recopilar y analizar enormes volúmenes de datos para identificar objetivos y realizar ataques.
Antes de la implementación de MSS, el proceso de direccionar el fuego se realizaba manualmente, lo que generaba riesgos de múltiples errores en todas las etapas, desde la recopilación de información y su procesamiento hasta la obtención de autorizaciones y la selección de municiones. Ahora, los militares han logrado una eficiencia comparable a la operación "Libertad Iraquí", pero con solo 20 operadores. En comparación, anteriormente se requerían alrededor de 2000 soldados para llevar a cabo tareas similares de designación de objetivos de artillería. Esto demuestra claramente cómo las tecnologías modernas pueden optimizar procesos y reducir la necesidad de recursos humanos.
Maven continúa mejorándose a medida que avanza en sus pruebas. En el proceso participan no solo militares, sino también desarrolladores, técnicos, probadores y expertos evaluadores. Los ejercicios comienzan con simulaciones y terminan con disparos reales contra objetivos de entrenamiento.
Una de las principales ventajas es la capacidad de integrar fácilmente datos de fuentes no previstas en el diseño original del sistema. Además, Maven puede ajustar los datos y restringir el acceso a ellos para usuarios de diferentes niveles. En esencia, el programa tiene en cuenta la jerarquía en las fuerzas armadas y funciona como un centro de control unificado.
Según un informe reciente del Centro de Seguridad y Nuevas Tecnologías (CSET), en el futuro la tecnología funcionará aún más rápido. Se ha fijado una meta ambiciosa: hacer que la IA pueda procesar 1000 objetivos en el campo de batalla en el transcurso de una hora.
El proyecto se lanzó en 2017. En ese entonces, se centraba en la adaptación de tecnologías comerciales de visión por computadora para el reconocimiento de objetos en videos. Inicialmente, la empresa Palantir recibió un contrato por valor de 480 millones de dólares para desarrollar un prototipo de MSS para el ejército de EE.UU. Con el tiempo, la idea evolucionó y se convirtió en un programa oficial del Pentágono.
Según un representante del 18º Cuerpo Aerotransportado, citado en un informe de Defense News, hoy en día, gracias a Maven, todo el proceso de reconocimiento de objetivos y apertura de fuego puede llevar solo unos minutos.