EE.UU planea proteger a los países en desarrollo de la injerencia política externa.
El Departamento de Estado de EE.UU. anunció una nueva estrategia de ciberseguridad destinada a disuadir la influencia digital de Rusia y China en los países en desarrollo y contrarrestar sus esfuerzos para interferir en las elecciones. Esta estrategia se dio a conocer el lunes y se presentó en la conferencia RSA en San Francisco, uno de los foros tecnológicos más grandes del mundo.
Según Nate Fick, el principal diplomático cibernético del Departamento de Estado, «Estados Unidos continuará exponiendo constantemente las actividades de los piratas informáticos y propagandistas que intentan socavar la confianza en la democracia en diferentes países».
La estrategia del Departamento de Estado sienta las bases para la cooperación con los países en desarrollo, ofreciendo una «visión afirmativa» del ciberespacio que rechaza cualquier injerencia digital. Se basa en los esfuerzos de años de Estados Unidos para persuadir a sus aliados y socios de no utilizar tecnologías y software de comunicaciones clave producidos en países autoritarios.
En su discurso, Antony Blinken, Secretario de Estado de EE.UU., enfatizó que las economías y democracias de diferentes países necesitan ciberseguridad para prosperar. Señaló que los ataques catastróficos de ransomware pueden paralizar una economía, y los gobiernos pueden utilizar software para hackear teléfonos y arrestar a los disidentes.
Por ejemplo, Costa Rica, un aliado de EE.UU., sufrió un devastador ataque de ransomware en 2022. En respuesta, EE.UU. proporcionó 25 millones de dólares para la recuperación después del ataque que afectó a las agencias de seguridad social y finanzas del gobierno de Costa Rica. El país también siguió el consejo de EE.UU. y rechazó el uso de tecnología china en sus redes móviles 5G, lo que provocó el descontento de Pekín.
Al mismo tiempo, como reconoció Blinken, en los mercados de algunos países, las compañías de telecomunicaciones chinas, como Huawei, continúan dominando, lo que intensifica la competencia con los proveedores de tecnología de cómputo en la nube de estados autoritarios.